
El proyecto “Capilla Inmaculada Concepción” fue trabajado bajo las primicias arquitectónicas de diseño. Una gran altura, 12 metros, para ofrecer la inmensidad de Dios, paredes laterales inclinadas, representando la acogida de Dios a sus hijos, con un arte que decora el templo con una sensación de grandeza y esplendor.
La fachada de la Capilla esta trabajada toda con luz empotrada en piso o alrededor de la misma, buscando hacer énfasis a la grandeza de esta, resaltando materiales, pero sobre todo su gran altura.
El atrio se trabajo con niveles mas bajos de luz, para resaltar la transición del exterior al interior y hacer más dramático el paso hacia la nave de doble altura. Lo único que buscamos resaltar es el cuadro de la Asunción de María, el cual fue trabajado de manera muy puntual y aprovechando sus colores cálidos logramos el impacto buscando.
La altura de la nave central se trabajó bajo el concepto de luz indirecta, buscando semejar ese ingreso de la luz de Dios, esa presencia suave y serena que brinda tranquilidad, se realizó con una luz indirecta de tres intensidades, las cuales pueden irse aumentando según el paso de las horas o según el evento a realizar. Las cintas son de Hi Performance, logrando así los niveles de iluminación ideales y cómodos para el lugar.
Además, se trabajó con una luz directa, como contraste, las paredes laterales inclinadas, esto con el objetivo de resaltar la inclinación y además separadas de la nave central para poder encenderlas solas y resaltar su arquitectura. Al mismo tiempo sobre estas esta colocado de forma única un vía crucis continuo, el cual se trabajo usando luz indirecta para renegar la sensación de brillo y poder acentuar el esplendor que queríamos en el espacio.
El presbiterio lo tenemos dividido lumínicamente según los ambientes religiosos, y en su conjunto logrando que el mismo tengo el doble de intensidad lumínica que la nave central. El altar, ambón, sede y presbiterio están trabajados con spots de ángulos medios con la idea de resaltarlos directamente y de forma independiente si se requiere. Pero logrando con la luz brillos en sus materiales y resaltando sus colores.
El retablo, el cual hace alusión a la grandeza del espacio, fue trabajado de forma diferente al resto del espacio, con bañadores de luz y una luz indirecta dentro del sagrario, la cual puede encenderse independiente del resto, logrando darle la importancia que se merece además de lograr que sus colores y materiales brillen. Se colocaron en dos líneas para lograr que las sombras en el retablo sean mínimas y correctas, resaltando su tridimensionalidad y gran altura.
Subiendo tenemos el coro, al cual se accede desde el atrio, el cual su acceso se trabajo con luz indirecta en su pasamanos, lo cual permite que la luz se integre a la arquitectura sin sobre salir ni competir. El coro fue trabajando con puntos de luz de pequeño tamaño, para conservar la pureza del material utilizado y que este no se viera invadido. Y logrando al mismo tiempo los niveles de luz adecuados para el uso que este requiere.
El objetivo principal y único del diseño lumínico fue que la luz se sintiera y fuera parte del proyecto sin sobresalir del mismo. Buscando resaltar los conceptos arquitectónicos con los que la capilla fue concebida, y a su vez respetar la importancia del uso del proyecto, generando un ambiente tranquilo y de inmensidad, con la luz indirecta, imponente, la luz de altar y paredes inclinadas, y de esplendor con la luz del retablo y vía crucis.